Los dos jóvenes que serán canonizados el domingo 7 de
septiembre aparecen representados en las nuevas emisiones filatélicas
presentadas por el Servicio Postal y Filatélico de la Gobernación del Estado de
la Ciudad del Vaticano. También se recuerda a San Carlos de Foucauld, como
testigo de esperanza en este Año Santo, y otras conmemoraciones, como el 550º
aniversario del nacimiento de Miguel Ángel.
Isabella H. de Carvalho – Ciudad del Vaticano
El próximo domingo 7 de septiembre, día en que los jóvenes
Carlo Acutis y Pier Giorgio Frassati serán proclamados santos por la Iglesia,
el Servicio Postal y Filatélico del Vaticano los celebrará con la emisión de
dos nuevos sellos, en colaboración con Italia, la República de San Marino y la
Orden de Malta, tal y como anunció el Governatorato el pasado 1 de septiembre.
El sello de Acutis reproduce una foto suya en la que aparece
sonriendo con una mochila a la espalda durante una excursión al monte Subasio,
un lugar muy querido para él por su vinculación con la memoria franciscana. El
de Frassati, en cambio, reproduce un retrato suyo, propiedad de la familia,
pintado por el pintor Alberto Falchetti (1878-1951). Se emitirán 60 000
ejemplares del primer sello y 50 000 del segundo, y ambos tendrán un valor de
1,35 euros.
"El testimonio de Carlo Acutis nos recuerda que la
santidad no es un privilegio de unos pocos, sino una llamada universal,
accesible a cualquiera que viva con autenticidad su fe", explica el
comunicado, añadiendo que el joven "vivió una existencia marcada por una
fe limpia y ardiente, poniendo el Evangelio en el centro de su vida cotidiana y
convirtiéndose en instrumento de evangelización también en el mundo
digital".
Frassati era "un joven de clase alta que, sin embargo,
prefirió ser el 'mozo de los pobres', arrastrando por las calles de Turín las
carretas cargadas con los enseres de los desahuciados", continúa la nota.
"Sus días estaban marcados por la oración, la ayuda a los necesitados, el
estudio y los amigos. Su profunda fe se alimentaba de la Eucaristía diaria, la
oración asidua y la confesión frecuente".